Por JAVIER FRANCO

Texto extraído del SEMANARIO PINTORESCO ESPAÑOL, EN LA WEB DE LA BIBLIOTECA NACIONAL, en su número 10 con fecha 8 de Marzo de 1857.

Hacia el 1600-1601 Fray Jerónimo de Sandoval un historiador de la iglesia visita Santo Toribio de Liébana para realizar un inventario de todas las reliquias custodiadas en este cenobio pues además del Lignum Crucis también se encontraban gran cantidad de ellas trasladadas a este lugar para salvaguardarlas de las huestes árabes durante la invasión musulmana.

Las reliquias que se hayan en este Santo Monasterio son:

LIGNUM CRUCIS

El Lignum Crucis es el mayor trozo de la Cruz de Cristo que actualmente se conserva.

Primeramente gran parte de la Cruz en que Cristo murió por nuestro remedio, que es de largo tres palmos y medio y al través dos palmos y más y es el brazo izquierdo de la Santa Cruz que la reina Elena dejó en Jerusalén cuando descubrió las cruces de Cristo y los ladrones. Está serrado y puesto a modo de cruz, quedando entero el agujero sagrado donde clavaron la mano de Cristo. Hará cincuanta años que se puso de esta forma, y con esta ocasión se hurtaron muchso pedazos que algunos traen ahora…

Está el cuerpo del santo monje Toribio, y sus santos compañeros Tolobeo obispo, Synobi diácono y Eusebio Eusóstomo, Yofazo.

Están en una capilla debajo de la tierra, cuya puerta está debajo de las gradas del altar de la Magdalena, doce cuerpos de los Santos Inocentes, que trajo Santo Toribio de Jerusalen.

Hay dos anillos del pontifical de Santo Toribio, que tienen virtud de restañar sangre por las cornerinas que tienen.

Hay una redoma de sangre de Santa Catalina, virgen y mártir.

Hay un pedazo de la columna donde amarraron a Cristo cuando lo azotaron.

Hay una espina de la corona que pusieron a Cristo.

Dos piedras con que apedrearon a San Esteban.

Un pedazo de paño de la Verónica de Cristo.

Una redoma de la sangre y agua que salió del costado de la imagen del crucificado que los judíos lancearon en la ciudad de Argentina.

Medida de los pies de Cristo.

Una buena parte de los cabellos de San Juan Bautista.

Hay un hueso de la mano de San Pedro Apóstol y dos de San Pablo.

Dos huesos grandes de San Gregorio Papa. Estos no los pudo traer Santo Toribio.

Dos huesos de San Hilario Obispo.

Una gran parte del pellejo de San Bartolomé, Apóstol.

COFRE SANTO TORIBIO

Cofre con varias reliquias en uno de los tres ábsides del Monasterio de Santo Toribio

De los cabellos de La Magdalena.

Una redoma del óleo que manó del sepulcro de Santa Catalina en el monte Sinaí.

Está el cuerpo del bienaventurado Santo Toribio, obispo de Astorga, patrón de todas las Asturias, a quien respetan todas las montañas con suma devoción.

Del pan que comía en el desierto San Pablo primer hermitaño.

Una redoma de la leche de Nuestra Señora.

Un pedazo del pesebre en que Cristo nació, que es una gran tabla del pesebre que la Reina Elena guardó.

Hay una cadena con que dicen que llevaron atado a Cristo, cuando lo llevaron a crucificar. Si la echan sobre los endemoniados, hacen extremos y visages espantosos. Hélo visto.

Hay del oro, mirra e incienso que los Magos ofrecieron a Cristo.

Hay del pan que comió Cristo con sus discípulos el Jueves Santo.

Están las toallas con que limpió Cristo los pies a sus discípulos el Jueves Santo.

Hay una gran parte del sudario de Cristo.

Item, en la capilla donde está el cuerpo de Santo Toribio y los demás Santos, y Santos Inocentes dichos, está un arca que ha quinientos años que el conde de Loveña y cincuenta hombres con él quisieron ver, y conforme a lo que el Conde dice en la donación que hizo de un lugar a este monasterio, cegaron todos, por su ciega curiosidad; y así nadie se ha atrevido después acá a tocar en ella, y es esta Santa Arca, según tradición, una de las que Santo Toribio trajo de Jerusalén.[/sociallocker]

Hay otras reliquias, más menudas, tierra Santa, y cosas de menos estima.

SEMANARIO PINTORESCO ESPAÑOL, EN LA WEB DE LA BIBLIOTECA NACIONAL, en su número 10 con fecha 8 de Marzo de 1857.